"El sentimiento formal de los antiguos exigía otra cosa. Para ellos la comedia terminaba en boda, la tragedia con la expiación o con la venganza y la obra musical ¡Con la misma nota!."
La obra del arte carece de un objetivo determinado, el artista obedece a su propio instinto, mas no a un objetivo. Esta es la diferencia de una obra maestra: " Todo el mundo puede realizar un ejercicio de armonía, pero nadie puede crear una obra de arte, y ni siquiera comprenderla" ....Así que el deseo de encontrar una cadencia adecuada al final de la frase, puede ser tan engañosa su cercanía que empequeñece la libertad del artista. Aunque aquí se trate la cadencia como un elemento en la construcción de una obra, cuyo objetivo no determina el final del instinto de la obra musical, se requiere tan necesaria rebelión ante los tronos europeos de Napoleón: La ¡Tonalidad!....
La sensación de conclusión en una obra musical no existe.¿ Existe una cadencia final perfecta en una obra musical? Quizás no.

La tonalidad comparada como la repartición familiar de los tronos europeos de Napoleón, se distribuye el sonido fundamental como inicio y final de la obra. Resulta natural el régimen de la tonalidad, donde un sonido matriz reparte tronos con menos "poder". La tonalidad- Sea mayor o menor- no determina la obra, es sólo una circunstancia que afecta. Por lo que no podemos considerar que una obra tiene que ser necesariamente tonal. La lucha de los tronos por el dominio de la estirpe del brillo del sonido fundamental, es la magia de la música moderna.
Ese sentimiento formal moderno es la guerra entre estas fundamentales, sin importar quien gane o quien pierda. Así la estirpe del dios Cronos- El sonido fundamental- se convierte en un gobierno. La obra no necesariamente comienza y termina con el mismo acorde, aunque se necesita humildad para aceptar que las grandes obras maestras buscaron ese equilibrio del régimen natural de la tonalidad.
Así se explique que una obra o una canción debe terminarse con la tónica, sólo es ese gas que adquiere el volumen de una forma. Más que ser la dialéctica del mundo atonal, es un mensaje para la humanidad.
Tanto para la vida y la armonía : El final no debe ser el mismo que el comienzo.....
Créditos:
1. Tratado de Armonía Arnold Shoenberg..
2.Napoleón en su trono imperial | La Era de Hobsbawm
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